La musulmana No necesita vestir el Hiyáb delante de mujeres no Musulmanas
Pregunta:
Utilizamos el servicio de doméstico de mujeres que no son musulmanas, ¿Puedo quitarme el Hiyáb en su presencia? Y ¿Pueden lavar las ropas que utilizo para rezar? ¿Puedo hablarles sobre los defectos de su religión y las virtudes del Islam?
Respuesta:
No es obligatorio vestir el Hiyáb en presencia de mujeres no musulmanas. No existe ningún inconveniente en que laven las ropas que sueles utilizar en las oraciones.
En relación con la segunda parte de la pregunta, referente a la invitación de las empleadas no musulmanas a la religión islámica, y mostrarles los defectos de sus creencias:
Es un hecho muy positivo para aquellas personas que tienen la oportunidad. Debes explicarles cómo la doctrina del Islam es la que difundieron todos los Profetas y Mensajeros.
Allah dice:
“Ciertamente para Allah la religión es el Islam.” (Ali 'Imrán, 3:19)
También dice en El Corán:
“Quien siga una religión diferente al Islam [el sometimiento a Allah] no se le aceptará, y en la otra vida se contará entre los perdedores.” (Ali 'Imrán, 3:85)
Debes hablar con conocimiento, porque decir algo de Allah o de Su Religión sin conocimiento es un gran error. Como dice Allah en el siguiente versículo:
“Diles: Mi Señor ha prohibido las obscenidades, tanto en público como en privado, los pecados, la opresión, la idolatría y decir acerca de Él lo que ignoráis.” (Al A'ráf, 7:33)
Esto demuestra que hablar de algo sin previo conocimiento es el hecho más grave de los citados en el versículo.
Allah dice también en El Corán:
“Di: Este es mi sendero; llamo a [la adoración] de Allah con conocimiento; yo y quienes me siguen, ¡Glorificado sea Allah! Y no soy de los asociadores.” (iúsuf, 12:108)
Hablar sin conocimiento es seguir los pasos de Shaítán, tal como dice Allah en el siguiente versículo:
“¡Oh, humanos! Comed de lo bueno y lícito que hay en la tierra y no sigáis los pasos de Satanás, porque él es para vosotros un enemigo manifiesto. Él os induce al pecado y la inmoralidad, y a que digáis de Allah lo que ignoráis.” (Al Baqarah, 2:168 y 169)
Solicito de Allah que nos guié, tanto a ti como a nosotros, y nos conceda la devoción.
Sheij Ibn Báz
La personalidad del Profeta |
La personalidad del Profeta. Mhaummad el Profeta, un hombre de verdad y de justicia. Muhammad era un hombre que amaba la verdad y la justicia y gobernaba de acuerdo a ello. No temía ser reprochado por aplicar la justicia. No halagó a nadie por su rango, dinero o linaje; por el contrario, apoyó al débil, y luchó contra el fuerte para devolverles sus derechos. Era muy justo, y se adhería a lo correcto siempre, sin favorecer nunca ni a los seres más queridos por él. Sucedió que una mujer eminente de la familia de Mekhzoum (una gran familia de la Meca en aquel momento), robó, por lo que se merecía un castigo por su crimen. Su familia fue a uno de los seguidores del Profeta, el más querido por él, para pedir el perdón del Profeta. Cuando Muhammad (la paz sea con él) escuchó la petición de su amigo más querido para perdonar a aquella mujer, se enojó mucho, por romper la santidad de la justicia después de haberse convertido en musulmán. Aisha dijo que Quraish estaba muy interesado sobre la mujer de la familia de Makhzoum, quien había robado, así que pensaron que nadie se atrevería a hablar con el Mensajero (la paz sea con él) en este caso, excepto Osama Bin Zeid, el más querido por el Mensajero. Osama habló con el Mensajero, quien contestó: “¿Has meditado en una de las leyes de Allah?” Luego se incorporó y dio un discurso hablándoles a las personas que las naciones que vivieron antes de ellos habían sido destruidas porque no habían castigado a los eminentes, sino que sólo habían castigado a los débiles cuando cometían algún crimen. Y juró que si su hija Fátima robaba, la castigaría. |
Facebook botón-like |
Información |
|